Las pruebas del Sistema de Evaluación de Progreso del Aprendizaje, SEPA UC, se insertan en el paradigma de la evaluación formativa, en que el uso de datos está ligado estrechamente a la mejora educativa y a la posibilidad de  visibilizar buenas prácticas docentes.

El programa de acompañamiento de SEPA, que desarrolla el equipo de Gestión y Uso de Resultados, tiene como propósito brindar todas las instancias de apoyo a los usuarios de las pruebas tanto en la lectura de los datos que arrojan los reportes de resultados, como en el uso de estos reportes para favorecer los aprendizajes de los estudiantes.

Este servicio de acompañamiento, que considera a los usuarios que aplican las pruebas SEPA UC, Avance UC y la evaluación NT2-Kínder, tiene como principal función apoyar la instalación de competencias para el uso de datos generados en las escuelas con el propósito de que se puedan tomar mejores decisiones pedagógicas al interior de las instituciones. “El objetivo final es instalar en las comunidades educativas competencias y herramientas que les permitan ocupar sus propios datos, no solo los resultados de las pruebas SEPA, en su ciclo de mejora continua. Las escuelas cuentan con una amplia variedad de datos -internos, externos, cualitativos, cuantitativos, de aprendizajes o socioemocionales-, pero la mayoría de las veces no se les da un uso ligado a estrategias efectivas de mejora de los aprendizajes de los estudiantes, ni tampoco se dan ciertas condiciones organizacionales para hacerlo, como el tiempo, espacio, trabajo colaborativo y un clima que no sea de amenaza, porque ante la amenaza los docentes no querrán usar los datos para mirar su propio desempeño. Es fundamental, entonces, que los directivos generen estas condiciones necesarias para promover los ciclos de mejora en el contexto de una cultura colaborativa de trabajo, en el que los estudiantes sean vistos como responsabilidad de toda la comunidad”, explica Verónica Yáñez, psicóloga educacional que coordina el equipo de Gestión y Uso de resultados de SEPA UC.

El acompañamiento a usuarios se propone en varias etapas, y la primera se relaciona con la entrega de resultados de las pruebas, periodo durante el cual se presta soporte a través de teléfono y correo electrónico, principalmente para asegurar el correcto acceso a la plataforma de entrega de resultados y la efectiva comprensión de los niveles de información proporcionados por los reportes. En un segundo momento, el equipo de Gestión y Uso de Resultados concreta reuniones con los equipos directivos para comprender el contexto de las comunidades educativas de SEPA UC, y las necesidades respecto del uso de datos para la gestión en dichos establecimientos. Tras las reuniones iniciales, se realizan otras en que se incorporan a docentes, con el objetivo de instalar entre ellos herramientas que promuevan el trabajo colaborativo y una cultura del uso de datos.

Al respecto, Verónica Yáñez explica que “buscamos que la primera instancia de trabajo sea con los equipos directivos o con quienes lideran el establecimiento, de manera de conocer su realidad y contexto, dado que no es lo mismo trabajar en una escuela donde hay un uso habitual de los datos para decisiones pedagógicas, que hacerlo en una donde hay mucha resistencia a su uso. De esta manera, empoderamos a los líderes de las escuelas en las ventajas del uso de datos y, al mismo tiempo, definimos una ruta de acompañamiento para esos establecimientos. Lo habitual es respetar y replicar la propia estructura de reuniones y de trabajo de las escuelas en las instancias de acompañamiento. Estas se realizan actualmente a través de plataformas como Zoom, modalidad que se instaló tras la pandemia y que nos permitió aumentar la cantidad de escuelas a las que acompañamos en todas las regiones de Chile”.

En el actual contexto de las comunidades educativas, muchas de las cuales están viviendo las consecuencias del cierre de escuelas tras la pandemia, la información que entregan los resultados SEPA complementando a sus datos internos, pueden ser usados para abordar esta realidad y reflexionar acerca de cómo se está retroalimentando a los estudiantes, es decir, acerca del uso formativo de las evaluaciones. “Nos enfocamos en la idea de la cultura incremental, en la que creemos que todos podemos mejorar, en la que se retroalimente al alumno respecto de su desempeño, que se le estimule a enfrentar nuevos desafíos, a trabajar con sus pares. Creemos que, colaborando y no compitiendo, no solo se aprende más, sino que -probablemente- tendremos un ambiente escolar menos violento, orientado a una resolución más pacífica de los conflictos”, asegura Verónica Yáñez.

El equipo SEPA a cargo del acompañamiento está compuesto por tres psicólogos educacionales, una profesora de Lenguaje y una trabajadora social. “La principal característica de estos profesionales es que tienen la capacidad de entender el contexto educacional, además de una mirada estratégica y reflexiva para adaptarse a las necesidades y requerimientos de cada establecimiento”, señala su coordinadora. Actualmente, las pruebas SEPA UC se aplican en escuelas de distintas dependencias, distribuidas en el centro, norte y sur de Chile, y tiene acumulados más de 14 años de experiencia evaluando los aprendizajes en establecimientos nacionales.