El organismo público encargó al área de Sociedad de MIDE UC un proyecto para diagnosticar, analizar y hacer recomendaciones respecto de cómo incorporar a su labor el enfoque de género, de multiculturalidad y de inclusividad para personas con discapacidad.
El proyecto, que se inició en marzo y concluyó en agosto de 2021, consideró una etapa de diagnóstico, la realización de conversatorios y talleres para los funcionarios del Consejo para la Transparencia, y un informe con las características y alcance del estudio, además de recomendaciones para integrar efectivamente los enfoques de género, discapacidad y multiculturalidad en la labor del organismo público.
Para desarrollar este estudio, MIDE Sociedad conformó un equipo con investigadores y académicos de diversas unidades de la Universidad Católica de Chile. Con el fin de abordar el enfoque de discapacidad se contó con la colaboración del Centro de Desarrollo de Tecnologías de Inclusión CEDETi UC a través de su director, Ricardo Rosas, y de su coordinadora de proyectos, Jimena Luna. En el caso de la perspectiva de multiculturalidad se unió al proyecto María Olaya Grau, académica de la Escuela de Trabajo Social UC, quien es especialista en dicho tema. Y, para el enfoque de género, se invitó a participar a la académica Gloria Jiménez Moya de la Escuela de Psicología UC. También participó del proyecto Carolina Muñoz, académica de la Escuela de Trabajo Social UC, quien abordó el enfoque de derechos desde una perspectiva global en el accionar del Consejo para la Transparencia.
En conjunto el equipo construyó y aplicó una encuesta online a los más de 140 funcionarios del Consejo para conocer sus percepciones y actitudes hacia los enfoques a incorporar, tras lo cual se organizó un conversatorio con los funcionarios, divididos en ocho grupos y dirigido por Carolina Muñoz y su equipo, sobre el concepto de interseccionalidad de derechos y la superposición de invisibilidades de dichos derechos que ocurre cuando ellos afectan a grupos sociales marginados de las estructuras de poder. De esta forma, durante la conversación en formato de taller, se cuestionó cómo la transgresión de derechos tiende a atenuarse en su percepción, o incluso a ser ignorada, cuando afecta a dichos grupos que no cuentan con poder o legitimidad social.
Además, se realizaron talleres de capacitación en los que, para cada uno de los enfoques abordados, se hizo un curso de seis horas. A esos talleres acudieron integrantes del Consejo para los que, por su cargo y función -atención de público, área de estudios o vinculación con la comunidad- es sumamente relevante la formación en estos temas.
Finalmente, el estudio terminó con la presentación de propuestas para cada una de estas dimensiones de enfoque sobre las tareas que el Consejo para la Transparencia desarrolla.
Acerca del alcance de este estudio, el director de MIDE Sociedad, Flavio Cortés, comenta: “Esta ha sido una experiencia novedosa y con alto impacto a la que fuimos convocados por Miguel Yaksic, Director de Promoción, Formación y Vinculación del Consejo para la Transparencia, y que sería muy útil replicar en organismos públicos. Los organismos del Estado, en general, no hacen esta labor de diagnóstico y posterior integración de enfoques de derechos sociales, y sería muy interesante que, en forma sistemática, la hicieran, porque es asombroso constatar cómo la carencia de enfoques de derechos en la labor habitual de una institución pública, dificulta o incluso excluye de una atención de calidad a ciudadanos en razón de su cultura, sexo o situación de discapacidad”.