Hace ya seis años que nos dejó don Jose y, a quienes llegaron después de mayo del 2014 a MIDE y no tuvieron el gusto de conocerlo, les contamos:
En el piso 7 disfrutamos por muchos años, antes incluso de que este edificio existiese, de un hombre bueno, trabajador, divertido, cariñoso, algo dormilón, el mejor bailarín y leal a toda prueba. Y aunque hace ya seis años que nos dejó don Jose, él vive con nosotros cada día, lo llevamos guardadito en nuestro corazón y lo queremos con la misma gratitud de siempre.
¡Abrazos al cielo, don Jose querido!
Equipo ADP